Tal vez les suceda como a mi y mi familia, a veces nos cansamos un poco del sabor del pollo …
Es allí donde aprender como marinar pollo de manera sencilla puede de ser de gran utilidad para combinar nuevas recetas de pollo:
Y les digo ello, porque con una simple marinada, podemos preparar platos con pollo marinado deliciosos, con mucho sabor, y sobre todo sin demasiado esfuerzo.
En esta guía les voy a enseñar dos técnicas diferentes para marinar pollo, una en seco y otra con un adobo húmedo. ¿Me acompañan ?
Recetas para marinar pollo
Marinada 1
- Presas de pollo 4
- Ají molido 1 cucharadita
- Ajo seco en escamas 1 cucharadita
- Pimienta negra recién molida y sal a gusto
Marinada 2
- Presas de pollo 4
- Mostaza de Dijon 4 cucharadas
- Miel 2 cucharadas
- Sal y pimienta a gusto
Técnicas para marinar carne de pollo
Iniciaremos por la técnica más sencilla: Emplearemos los ingredientes de la marinada número uno.
El primer paso será limpiar las presas de pollo en caso de que éstas tengan demasiada grasa .
Una vez que tengamos bien limpio el pollo procederemos a marinarlo, para ello lo colocaremos en una bowl de vidrio y agregaremos allí todos los condimentos detallados en la descripción de la primera marinada.
A continuación emplearemos nuestras manos para mezclar muy bien estos condimentos logrando que cubran de manera pareja todas las presas de pollo.
Tapar el recipiente con un papel film y llevar a la heladera por al menos dos horas.
Recuerda que en esta marinada puedes agregar las especies que más te gusten, es sólo cuestión de probar sabores e ir descubriendo cuál de ellos es el que más te agrada.
Para la segunda marinada haremos lo mismo con las presas de pollo, descartando la grasa excedente.
Reservar el pollo dentro de un recipiente de vidrio.
En un pequeño cuenco mezclar la mostaza de Dijon junto con la miel, una pizca de sal y pimienta, mezclar muy bien hasta lograr una preparación homogénea.
Con ayuda de un pincel cubrir las presas de pollo con este preparado, colocarlo nuevamente en el recipiente de vidrio, tapar el mismo con papel film y llevar a la heladera por espacio de dos horas.
Transcurrido este tiempo habremos logrado que nuestras presas de pollo tomen todo el sabor de la marinada, haciendo de su carne algo irresistible! Sólo restará cocinar el pollo en la parrilla, en el horno o en la plancha.
Recuerda que puedes emplear estas técnicas tanto con pollo con hueso, como con pollo sin él, incluso también puedes retirarle toda la piel si buscas un plato más saludable y con menor contenido calórico.
Espero pruebes éstas técnicas y te gusten. Hasta pronto!