Muchas veces hemos sentido ganas de comer un delicioso pollo crujiente, pero a veces evitamos preparar este tipo de recetas de pollo ya que pensamos que sólo lograremos un pollo crujiente al cocinarlo en aceite.
Podrás comprobar con estas deliciosas pechugas crujientes al horno que es perfectamente posible preparar un delicioso plato caliente con una irresistible textura crujiente sin necesidad de freír el pollo.
Esta receta de pechugas crujientes al horno rinde cuatro porciones abundantes, ideales para acompañarlas con un cremoso puré de papas condimentado con una pizca de mostaza.
Ingredientes para hacer pechugas crujientes al horno
- Pechugas de pollo 4
- Mostaza de Dijon 1 cucharada sopera
- Manteca 1 cucharada
- Ciboulette picado 5 cucharadas colmadas
- Leche un tercio de taza
- Salsa Tabasco una pizca
- Sal y pimienta a gusto
- Pan rallado 1 taza
- Queso parmesano rallado grueso 6 cucharadas
Como hacer pechugas crujientes al horno
El paso más importante de esta receta de pollo es la marinada, y por allí comenzaremos a preparar esta receta.
En un recipiente, de vidrio preferentemente, mezclar la leche, la manteca a punto pomada, la mostaza de Dijon, el ciboulette picado, la salsa tabasco junto a una pizca de sal y pimienta negra recién molida.
Unir muy bien todos estos ingredientes y colocar dentro las pechugas de pollo, dejar reposar en heladera por aproximadamente dos horas.
Transcurrido dicho tiempo estamos en condiciones de terminar nuestras pechugas para llevarlas a cocción, el último paso es rebozar cada una de las pechugas en el pan rallado junto con el queso parmesano. Presionar muy bien por ambos lados para lograr un rebozado compacto, que nos permitirá obtener después de la cocción la deliciosa textura crujiente.
Colocar las pechugas sobre una placa de horno previamente aceitada y cocinar en un horno a 180° por 25 minutos hasta dorar.
Terminada la cocción lograremos estas deliciosas y doradas pechugas crujientes al horno.